"En las últimas décadas se ha producido
un cambio brusco en la manera de vivir de los españoles. La España
tradicional ha dado paso a la España moderna o, al menos, urbana. Pero
ese cambio, seguramente necesario, no ha sido la transformación gradual
que muchos hubiéramos deseado, sino una ruptura. Los españoles
están olvidando cómo vivían sus padres, cómo hablaban,
qué sonidos pronunciaban, cómo se divertían... Y todo,
en el paso de una sola generación."